Conocida como 'Piedra de la Paz', la amatista irradia energía positiva y purificadora, creando un ambiente armonioso en cualquier espacio en el que se encuentre.
Cada capilla de amatista es una obra de arte de la naturaleza, con su característico color púrpura que simboliza la espiritualidad y la intuición.
Estos santuarios son perfectos para acompañar la meditación, reflexionar y encontrar la paz interior. Su presencia en el entorno no solo añadirá un toque de elegancia y misticismo, sino que también te brindará un refugio tranquilo en medio del ajetreo de la vida moderna.
El citrino pertenece a una familia de gemas amarillas conocidas por su cálido color amarillo pálido y su vibrante energía. Es un cristal de cuarzo de varias tonalidades, que van del amarillo suave y claro a tonos ámbar más profundos.
Hoy en día, el citrino es una gema muy popular en joyería y en las prácticas de sanación y meditación con cristales. A menudo se lleva como talismán para atraer la abundancia y la prosperidad. Se asocia con el chakra del plexo solar, en la parte superior del abdomen, y con el poder personal, la confianza en uno mismo y la salud digestiva.
